Debemos estar en alerta ya que el periodo de aparición de estas orugas es de febrero a abril, pero cada año se amplía su periodo de aparición debido al cambio climático por lo que, pasadas las heladas de invierno, hay que estar muy atentos porque ya podríamos encontrarlas.

Thaumetopoea pityocampa es su nombre, aunque se la conoce comúnmente conocida como "procesionaria del pino". Cuando salen del nido, todas las orugas se desplazan en fila unidas por sus extremos como si fuera una procesión. Si se las observa desde lejos, parecen una sola.

Este tipo de orugas además de los pinos, también pueden encontrarse en cedros y abetos.

En las ramas más altas se colocan en nidos de color blanco. Bajan en fila y se desplazan al suelo que es donde más peligrosas son para nuestras mascotas. Estas suelen olerlas o lamerlas

Estas orugas están provistas de más de 50.000 tricomas (pelitos) por toda su superficie corporal, y en caso de sentirse amenazadas, los liberan. Debido a la naturaleza curiosa de nuestras mascotas, si se acercan a olfatearlas o lamerlas, estos tricomas pueden clavarse en hocico, cara y lengua, liberando la toxina e infectando a nuestro animal.

¿Qué síntomas podemos encontrar en nuestra mascota?