Esta historia va sobre Loki, un Golden Retriever blanco como la nieve y más dulce que un terrón de azúcar.

De todos es sabido que los Golden, los anuncios del papel higiénico en España han hecho mucho daño, son verdaderas aspiradoras. Todo lo que hay en el suelo es suyo. Todo. Y va para dentro a la mínima que el dueño se descuida. Si este vive cerca de espacios de campo libres, la fiesta no para. En consecuencia, con este comportamiento "absorbente" los problemas de estómago son habituales. No es raro cada dos semanas una diarrea caiga, al igual que los síntomas de que se ha tragado algo y no lo puede expulsar. LOKI no es una excepción.

La historia de Loki puede ser la historia de cualquier perro. Una noche Loki empezó a toser como si le fuese la vida en ello. Una tos seca que no paraba. Su dueño lo primero que pensó es "ya se ha comido algo que le ha sentado mal". Lo saco a la calle, Loki hizo sus necesidades y como era habitual en el en estos casos, las heces eran algo ligeras. Como era habitual en Loki, o al menos eso pensaba el propietario, lo puso con dieta blanda unos días para que se le pasase su malestar. Los días pasaban y la tos no cesaba. Todas las noches cuando Loki descansaba volvían las toses. Por fin, después de una semana el propietario decidió acudir a su veterinario habitual. "Tiene toda la pinta de ser tos de las perreras" le dijo la veterinaria. Vamos a hacer a Loki una placa de Torax para ver que no tenga complicaciones. Y SORPRESA, le detectan una dilatación cardiaca grave. Lo que viene a ser un aumento anormal del tamaño de las cámaras del corazón, generalmente los ventrículos, debido a una debilitación de las paredes musculares del corazón. Resumen, esta jodidillo. Lo que en un principio parecía algo gastrointestinal, paso por una tos de las perreras y termino con una dilatación cardiaca grave. Una semana que podía haberle costado la vida a Loki.

Moraleja:
"No des por sentado lo que parece obvio, porque a veces lo que no vemos a tiempo puede costar lo más valioso."

Esta historia nos enseña que la salud de nuestras mascotas merece atención inmediata ante cualquier síntoma inusual. La experiencia y la intuición son importantes, pero no sustituyen la opinión de un especialista veterinario. Escucha a tu mascota, porque su bienestar está en tus manos.

Equipo Veterinario Isabel Priego